Categoría: Ajedrez
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Mala combinación
La torre avanzó tambaleante en zigzag y gritó «¡JAQUE MATE!». Todas las piezas, tanto las compañeras, como las enemigas, asombradas dijeron «¡¿QUÉ?!» La torre, mareada, giró y trató de enfocar la vista buscando al rey enemigo, a quien alcanzó a ver apenas de manera borrosa en otra fila del tablero.Pensaba y pensaba y trataba de pensar.…
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Cortometraje argentino basado en mi cuento «Mi turno» :]
Pues resulta que me he llevado la agradiblísima sorpresa de que acabo de recibir un correo electrónico de Facundo Andrade Díaz, argentino, estudiante de producción, en el que me informa que realizó un cortometraje sobre una adaptación de mi cuento de ajedrez «Mi turno» y que lo subió a YouTube. :] Les pongo el enlace…
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Despiste cromatico
El rey negro estaba enojado Un despistado le dijo rey afroamericano.
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¡JAQUE MATE!
La partida era muy aburrida y lenta por lo que el rey se estaba durmiendo tras su enroque. En ese momento una voz atronadora gritó: ¡JAQUE MATE! Todos los peones estaban tirados en el tablero risa y risa felicitando al peón que estaba frente al rey a quien se le había ocurrido la broma. Pero…
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Al paso
Aquel peón estaba nervioso. Miraba con recelo al peón contrario que tenía muy cerca. Gulp, pensó, si avanzo un paso, me come. Pero entonces se tranquilizó al recordar que aún no se había movido así que podía optar por avanzar dos casillas. Pero al recorrer ese par de casillas se sorprendió al ser capturado. El…
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¡Ven, acércate!
El rey vió a la dama contraria aproximarse seductoramente. ¡Ven, acércate! Le decía melosamente. Afortunadamente la torre le dió un codazo y lo despertó de su embrujo, evitando con ello que su monarca cayera en la tentación de la reina enemiga.
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Colocó la última pieza.
Colocó la última pieza. Paradójicamente ese instante perfecto en que todo estaba en su sitio marcaba el momento del inicio de la partida…
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Microcuento de Ajedrez: Podía ganar la dama contraria
De pronto vió que podía ganar la dama contraria.Le pareció que el otro jugador, aunque serio y concentrado, hacía un gesto de preocupación.Así que tomó a la dama enemiga. Para entonces recibir un ataque masivo y contundente que dió mate a su rey en unas cuantas jugadas.Eso le enseñó a ser precavido. Porque a veces…
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Microcuento de Ajedrez: su primera vez… otra vez.
El sonriente anciano regaló su viejo juego de ajedrez a su inquieto nieto. Las veteranas piezas esperaban expectantes la primera partida del niño. Se estremecieron con los recuerdos al volver a recorrer los caminos titubeantes de su primera vez… otra vez.
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Microcuento de Ajedrez: ¡Libertad!
Al grito de «¡Libertad!» las piezas salieron de los límites del tablero.Una vez fuera y ya pasada la euforía de la liberación, se sintieron inquietas y fueron regresando una a una a la seguridad y comodidad conocida de las casillas del tablero.